Anouk Guiné nació en el País Vasco norte (Iparralde-Francia), pero conoce el Perú como si fuera su segunda patria. Su vida profesional y cotidiana transcurre entre ambos países y diferentes continentes. Es socióloga, hispanista y anglicista, doctora en Estudios de Género y Estudios Anglosajones por la Universidad Blaise Pascal de Clermont-Ferrand en Francia y post doctorada en Sociología por el Institut National D´Etudes Démographiques (INED). Ha ejercido la docencia en el Departamento de Ciencias Políticas de la New School for Social Research (Nueva York) y en la Universidad para la Paz en Costa Rica.
Actualmente es profesora-investigadora en la Universidad Le Havre Normandie (Francia), donde se desempeña también como integrante permanente del Groupe de Recherche Identités et Cultures (GRIC) y jefa de redacción de la revista internacional en Letras y Ciencias Sociales EOLLES (Epistemological Others, Languages, Literatures, Exchanges and Societies).
Guiné tiene una trayectoria de investigación científico social relacionada a la memoria e historia reciente del conflicto armado peruano. En 2018, codirigió el libro colectivo Género y Conflicto Armado en el Perú (Lima, La Plaza Editores & Gric, Le Havre). Voz Nuda / Voix Nue, fue su primer poemario, publicado en 2004 en Medellín, Colombia.
Desde una mirada crítica y sin conservadurismos, ella afirma que ninguna investigación científica es neutra, sino que existe un posicionamiento político por parte de quien investiga. Esta premisa que sostiene Guiné ha sido fundamental para visibilizar el papel de las mujeres que pertenecieron a las insurgencias en Perú. Un desafío a los estudios feministas tradicionales y convencionales que despolitizan el pensamiento y acción política de las mujeres militantes, guerrilleras del proceso armado. La vacancia de una historiografía, aún en debate, desde los estudios de género, es una de las líneas de investigación de Anouk Guiné.
De hecho, estas disputas enmarcadas en el género, la política y las luchas sociales no quedan exentas de la posición y subjetividades de quien investiga. Los estudios de las memorias sobre procesos violentos o traumáticos suelen permear las sensibilidades de la investigadora. La mirada rigurosa con la que se analiza el objeto de estudio nunca depone su humanidad. Sentir las memorias es un ejercicio reflexivo, pero sobre todo de creación y catarsis sobre los procesos complejos y difíciles que afrontan las sociedades, en especial la peruana.
Para esta segunda edición de Trenzar Memorias, Guiné nos comparte doce poemas de su libro inédito Extrema Unción. Una serie de versos donde la memoria del pueblo peruano que retrata connota una emergencia de sanación y liberación. En la selección también se incluyen poemas que aluden a lugares y las desigualdades que lo habitan. O a territorios donde las culturas preincas marcan la historia latinoamericana. Además, incluye su poema Azúcar de su libro Voz Nuda (2004). En los escritos de Guiné, la presencia de las mujeres es una línea constante que reverbera su imagen y la reivindica.
Les invitamos a leer este adelanto con el que Anouk Guiné nos deja sentir esas memorias; creación que hace mérito a sus años de investigación científico social.
Del poemario inédito Extrema Unción de Anouk Guiné
Para la revista Trenzar Memorias
KAÑARIS
Recorrí la vida quebrada
De tu cabecera de cuenca
Kañaris mi niña herida
Sangra la falda de tu cerro
Despojada de su ornato
Ruge el macizo andino
Gimen los pumas
Arden los manantiales
Sin voz las cumbres
Vejados tus bosques
Destruido el árbol de la quina
En los cantos de neblina
Dispersa la luz de las orquídeas
Ahogadas las lianas
Ya avisaron las bromelias
Aquejados tus cultivos
Yuca y quinua
Mama sara y mashua
Llora tu meseta andina
Suavemente ondulada
Temerosos tus caseríos
Atumpampa y Mollepampa
Quirichima y Hierba Buena
Shin shin Seg seg Illambe
Nitubamba y Mamagpampa
Humillados los mitimaes
Herida su pachamama
Ausente el amaranto
Sin tawri o capulí
Ofendido está el Inti
Presiento aguas que fraguan luchas
En zonas yungas y zonas quechuas
Por los espíritus protegidos
Descendientes son los Kañaris
De la culebra y la guacamaya
Contra dolores un manteo
Flor de mil mil y albahaca
Flor de mil mil y toronjil
A la minera coser la boca
Que no salga muy habladora
No ganarán oro con engaño
Si un día brota la violencia
Resistirá el yanacona
Cantará la guacamaya
Morderá la culebra
CARAL
Caral es una mujer de cuarzo
Lideresa en medio de los curacas
Que controlan el sol, la shicra y los quipus
De una tierra de antaras y flautas
Abiertas al acerámico cielo
Donde contemplo moluscos y monos
en la Huaca de los Ídolos de arcilla
Hasta formar serpientes bicéfalas
Para que nuestras sangres se entretejan
Un Caral devastado por la pobreza
Del niño de algodón que me lleva
A caballo hasta el campo de maíz
Donde vigila acurrucado
El horizonte del mañana sin escuela
Mientras le doy seis soles por recorrer
A su lado cien metros de esperanza
En la tierra de una sociedad sin armas
Donde me guía la lideresa solitaria
LAS CONCHITAS
En Ancón bella, negra arena
y negra la piel que la habita
Son las orgullosas diosas brunas
Las muy gozosas cholas
bajo las sombrillas coloridas
de la dulce playa Las Conchitas
En Ancón bella, negra arena
y blanca la piel que la fragmenta
como en tiempos de la colonia
Parcelas privadas, reservadas
exclusivas y privilegiadas
¡Estas sombrillas ya tienen dueño!
La playa es solo de quien paga
aunque la ley bien lo prohiba
Pero la sombra no es pública
para quienes la desean limpia
Mañana irá la policía
Que la burguesía pague su gabela
CHUSCHI
Me quiebra tu voz
enferma como el pueblo
armado de dolor
1980
Desde las tinieblas de la ánfora
cántaro alto y estrecho
de cuello largo
con dos asas
dos líneas
y un cuerpo por parir
COMIDA POPULAR
Hay un canto que (no) entiendes
Un canto de dolor y de lucha
Un canto que asalta
Como la masacre de los pobres
En los altiplanos andinos.
Se organizan para la vida
Teatro de guerra prohibida
Hay un canto que (no) oyes
Discreto pez en el agua
El canto de la contradicción
La que te hace preguntarme
Si hago mía la comida popular
De tu país en sangre
Teatro de guerra sin fin
Hay un canto que (no) defiendes
Un canto negro que gangrena
Y narra el odio
De una clase en lucha
Que se volvió nuestra
INGRÁVIDO RUMOR
Hay un pueblo dormido en mí
Desvelo nuestro día por nacer
arrimado a una fe rebelde
que sentirá el ingrávido rumor
Leve y tenue mano inspirada
en la obra de toda creación
sin quitar una hebra de hilo
a las grandes masas de mujeres
librando desde siempre la lucha
contra las armas que apuntan
matan y asesinan
al pueblo dormido en mí
Los tambores cortando los vidrios, y en el aire
un silencio complicado y torpe. Demasiado para una mañana
húmeda y tibia de invierno.
José Antonio Mazzotti, 19 de junio
PUKA
Érase una vez una isla penal
Declarada zona militar restringida
Pájaros de guerra
Infantería de Marina
Plan genocida
Exterminio del comunista
Resistencia engendra
Guerrilla contra granada
Puka contra bazuka
Armas contra piedras
Revolución contra las hienas
Las masas hacen la historia
La rebelión se justifica
Al final del bombardeo
Alto al fuego
Se rinden los heridos
Son presos muy políticos
La orden es aniquilar a todos
De cinco en cinco fusilados
Escuadrones
Sangres extrajudiciales
Todas las sangres extrajudiciales
Entre cadáveres reptan sobrevivientes
La trinchera se vuelve fosa
Traumatismo por atricción completa
Hemorragia por proyectil de arma
A los asesinos terroristas
no los va a amilanar la pena máxima
Sepan los subversivos que han despertado al león
Asesinato por explosión
Calurosa recepción
en el Frontón
Quemados sus cuerpos
Cadáveres exquisitos
Embolsados los restos humanos
A cementerios clandestinos son llevados
Por militares devenidos arqueólogos
Homicidio calificado
Acusados : Treinta y tres marinos
Impunidad para presidente y ministros
El crimen es de lesa humanidad
Asesinato por ferocidad
Las familias reclaman sus muertos
-Exhumar-
Erigen una cripta
-Inhumar-
La Santa Inquisición condena
-Destrozar-
DE PURA GRACIA
Cuando apuntes a la verdad
no te olvides de disparar un tiro
de pura gracia porque
de pura gracia te amaré
Hierba silvestre, aroma puro
te ruego acompañarme en mi camino
serás mi bálsamo en mi tragedia
serás mi aliento en mi gloria.
Edith Lagos, Hierba silvestre
LA VOZ DE LAS PRISIONERAS
Desde las trincheras del dolor
despliego la caricia
avasallada por la muerte
Del cemento florece la lucha
pero la razón no se encierra
Seguirá flotando tu bandera
roja roja de tanta guerra
Cuanta vida silenciada
en tu camino de privada libertad
por tanta amnesia y tan poca amnistía
CANTO PRIMORDIAL
A la mujer luchadora que conozco
y siempre nos recuerda
el combate de la luz
y el canto primordial
Repetición de los muertos y de los abandonos y los más puros
Subían hacia su calvario
M. Houellebecq, Nuevo reparto, El sentido del combate
NUESTRO LARGO SILENCIO
Nuestro largo silencio
excava su propia tumba
hasta las raíces
donde yaces inmóvil
Sombrío rocío devastado
por lo infame que respira
la infinita masa humana
Sísifos incisivos
de los cuerpos arrumados
EXTREMA UNCIÓN
El camino que tomaste
Se derrumba y se rearma
Comprime muslos
Arrancavenas
Despuebla miradas
Quieren enterrar tu memoria
Extrema unción
Para el pueblo
AZÚCAR
(De su libro Voz Nuda)
Vuelvo donde quedó mi historia
En los pliegues de tu frente
Mamita linda de las arrugas alegres
Como la chicha
Sabor a Cristo morado
Vuelvo donde dejé mi historia
En la fosa de los desamparados
Huaca de mis restos
Aficionados a tu piel
Canela cobre
Donde dejé mi historia
La de mi Pueblo Libre
Río Moche fluye en mi sangre
Inundando esos versos
En azúcar morena
Trenzar Memorias, No. 2, Noviembre, 2021